viernes, 18 de diciembre de 2009

La muerte de Arturo Beltrán Leyva

El miércoles 16 de Diciembre, efectivos de la Armada, mataron a Marco Arturo Beltrán Leyva, jefe del cártel que lleva sus apellidos. La noticia fue retomada en varios diarios internacionales, el New York Times reseñó el hecho en una nota de su edición en línea del jueves, por ejemplo.

El hecho ha sido promovido por el Gobierno Federal como uno de los mayores logros de la "guerra" contra el narcotráfico. Calderón lo anunció en una conferencia en Copenhague y dijo que se había dado muerte a uno de los tres narcotraficantes "más buscados" de México y la Armada, en su Comunicado 325/2009 del 17 de Diciembre, anunció que: "resultó muerto Arturo Beltrán Leyva, líder del cártel de Sinaloa".

Las ansias por tener logros importantes en esta guerra auto impuesta y repudiada por amplios sectores de la población, llevó a Calderón a mentirle a la sociedad, respecto al impacto de este golpe y respecto al lugar que Arturo Beltrán ocupaba en la estructura del narcotráfico en México.

Arturo Beltrán Leyva no era el líder del cártel de Sinaloa al momento de su muerte, o lo fue en cualquier momento de su vida. Cuando formaba parte de esta organización, era jefe de sicarios, controlaba dos grupos:
"Los Pelones", en el estado de Guerrero, y "Los Güeros", en Sonora.

En Enero del 2008, los Beltrán Leyva se separaron del cártel de Sinaloa por diversas razones, la detención de uno de los hermanos (Alfredo) y desacuerdos económicos con Joaquín Guzmán (El Chapo) y respecto a la distribución de territorios.

Los Beltrán Leyva, ya separados del cártel de Sinaloa, controlaban una gran parte de Morelos, y territorios en Guerrero, Chiapas, Querétaro, Quintana Roo, Sonora, Sinaloa, Tamaulipas, estado de México y el Distrito Federal.

Se aliaron a los Zetas, escisión del cártel del Golfo para pelear territorios a la Federación,
integrada por los cárteles de Juárez, Sinaloa, Guadalajara y Milenio.

Sin embargo, estamos hablando de una estructura de segundo nivel, una que controlaba, según Edgardo Buscaglia (experto en temas de narcotráfico y asesor de la ONU en este tema) alrededor de diecisiete por ciento del contrabando de droga que pasa por México, mientras que el cártel de Sinaloa, con su alianza, controla cerca del sesenta por ciento de éste.

Calderón hace mal en inflar este triunfo, en su intento por nublar las fuertes críticas que ha recibido su estrategia de combate al narcotráfico. Está tan ocupado en no admitir que su estrategia no está dando resultados, que hace no muchos días llamo a desoír a los "inocentes" que piensan que el problema se arreglaría "como por arte de magia".

Llamó entonces a desoír a los miles de manifestantes en Ciudad Juárez que el día 6 de Diciembre le solicitaron revisar su estrategia porque su ciudad es la más violenta del mundo, a pesar de la fuerte presencia militar en ella.


Llamó a desoír a las miles de personas que han interpuesto demandas en la CNDH por violaciones a sus garantías por parte del Ejército.

Viene la muerte de Arturo Beltrán Leyva y se cuelga de este hecho para seguir justificando su guerra, que más de un analista considera, más que una estrategia de combate al narcotráfico, su medio de legitimar a su gobierno, ante las críticas por su origen en las cuestionadas elecciones del 2006 y su pésimo desempeño en materias económica y social.

Las estructuras del narcotráfico mexicano quedaron intactas después de este hecho, incluso del propio cártel de los Beltrán Leyva si, como ellos reconocen, Edgar Valdéz Villarreal (La Barbie) no murió en este operativo ni fue detenido en el del día 11 en el fraccionamiento "Los Limoneros", en Ahuatepec, Morelos.

El hecho es que se mantienen intactas las redes financieras de los cárteles y con este golpe, más bien le hicieron un favor al Chapo Guzmán, al eliminar a uno de sus enemigos más molestos, como acusa la Rayuela del diario La Jornada, el día jueves 17 de Diciembre.

Es preocupante que el Gobierno Federal esté intentando desinformar a la sociedad con este hecho. No, no se detuvo al tercer hombre más buscado de México y no, no murió el líder del cártel de Sinaloa, ese sigue vivo y permanece siendo el fugitivo más famoso del sexenio foxista.

Lourdes Lorence Quiñones

lunes, 14 de diciembre de 2009

La crisis del PAN

A nueve años de haberse convertido en el "partido oficial", el Partido Acción Nacional (PAN) padece una crisis sistémica que le acarrea graves problemas en su relación con las otras fuerzas políticas y le impide servir como impulsor y operador de la propuesta política del gobierno emanado de sus filas.

Esta crisis tiene que ver con el desgaste de la figura de Felipe Calderón, pero sobre todo, a un problema menos obvio y más profundo: El PAN no tiene liderazgos medios.

Para gobernar con la estructura del Priísmo (que el PAN no desmontó a su llegada al gobierno federal con Vicente Fox) el partido en el gobierno requiere de operadores
para negociar con las otras fuerzas políticas, sin embargo, a falta de éstos, se ha visto obligado a ceder espacios y negociar directamente a través de los altos funcionarios del gobierno federal todas las decisiones que no son competencia exclusiva del Ejecutivo.

La crisis del Partido tiene una sintomatología notoria, sin embargo, para fines prácticos, esta vez me concentraré en tres síntomas para tratar de ejemplificar brevemente esta situación.

El primer síntoma tiene que ver con las personas encargadas de la estructura media en el partido. Tenemos, por ejemplo, a Carlos Hermosillo a cargo de la Secretaría de Vinculación con la Sociedad para el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN, o el ya famoso Consejo de Cultura, al que Manuel Espino nombró "Consejo de Intelectuales", integrado por personajes como
Maribel Fernández “La Pelangocha”, Isabel Martínez “La Tarabilla”, “Pompín” Iglesias, Evita Muñoz “Chachita”, Irma Lozano y el mago Ednovi.

Este nuevo PAN desdibujado y débil produce propuestas al nivel de dichos personajes. El ejemplo más claro de esto es la propuesta cultural del PAN para las elecciones del 2009, que fué motivo de una fuerte crítica por parte de Carlos Lara, militante del PAN y asesor en materia cultural del partido en la Cámara de Diputados, en un artículo publicado por la revista PROCESO en su número 1715 del
13 de septiembre de 2009, que señala la inexistencia de una propuesta en materia de cultura del PAN en la presente legislatura.

Más grave aún, la Presidencia de la Comisión de Cultura de la actual Cámara de Diputados la ostenta la panista Kenia López Rabadán. El partido sin propuesta en materia cultural, se quedó con la presidencia de la Comisión respectiva. Ya podremos imaginar los problemas que tendrá la diputada para generar consensos con las organizaciones culturales del país.

El segundo síntoma se refiere a la campaña de afiliación del PAN, promovida por el actual presidente del partido, César Nava, que se llama "Entra en acción", cuya propuesta gira en torno a la promoción de la afiliación a través de personajes jóvenes del espectáculo o de los deportes. La meta era afiliar a trescientas mil personas, aunque el perfil de la campaña dejó muy claro que la audiencia meta eran los jóvenes.

Para este fin, utilizaron entre otros, a personajes como Iridia Salazar, Alfredo Adame, Paty Sirvent (Patylu) y Mariana Ochoa. Como resultado, el 6 de Diciembre, César Nava anunció que superaron la meta de afiliación y lograron inscribir a trescientos setenta y un mil trescientos setenta y siete nuevos miembros del partido.

Hasta ahí todo muy bien, nada más que dicha campaña de afiliación contiene serias contradicciones ideológicas con el perfil de partido. El personaje más señalado para ejemplificar esto, es Mariana Ochoa, pues su imagen en sí, es una contradicción a los principales postulados morales del PAN. Estamos hablando de un partido conservador, de cuyas filas han salido funcionarios públicos que han prohibido el uso de minifaldas para los miembros femeninos de la plantilla laboral de sus gobiernos, y que enarbolan públicamente la defensa de los valores católicos por sobre los del estado laico.

Así, el uso de la imagen de Mariana Ochoa, quién posó semi desnuda para una revista para caballeros resulta ser, por lo menos, un mensaje contradictorio. Los miembros afiliados son la base de la formación de cuadros de un partido, y entonces tenemos una cúpula profundamente conservadora y una nueva ola de seguidores de Mariana Ochoa en plena acción política.

¿Qué tipo de liderazgos emergerán entonces de esta oleada de nuevos miembros? Ya los gobiernos estatales tienen su cuota de miembros sui géneris (por decir lo menos), como Javier López (Chabelo) Sánchéz, actual Coordinador General de Asesores y Comunicación Política del Gobierno del Estado de Morelos.

El tercer síntoma se refiere al método de elección de mandos al interior del CEN. Sin ir más lejos, la elección de César Nava, después de la dimisión de Germán Martínez como Presidente del partido, distó de ser tersa y estuvo rodeada de controversia.

Para empezar, se organizó un grupo de opositores a la intención de Calderón de imponer a Nava en una candidatura única, y este grupo cuestionó, no sólo la pertinencia de continuar con una estrategia de tener en el Presidente del partido a un "colaborador" de Felipe Calderón, sino el valor democrático de una elección con un candidato único, que además estaba siendo impulsado desde los Pinos, sin mucha consideración por el respeto al mecanismo interno de la elección de acuerdo a los estatutos del partido.

Esto tuvo consecuencias graves, sin consenso con las otras fuerzas dentro del partido, el círculo de colaboradores de César Nava está conformado por personajes desconocidos, sin poder de negociación y con poco poder de convocatoria.

La fractura es más evidente con el grupo foxista, de entre los que destaca Manuel Espino, quién acaba de publicar una carta responsabilizando a Felipe Calderón por cualquier atentado a la integridad física de algún miembro de su familia por su desacuerdo con la estrategia de combate al narcotráfico del Gobierno Federal y la respuesta de Calderón diciéndo que había que "desoír a los inocentes" que "piensan que el problema se puede resolver por arte de magia".

Estas tres dimensiones nos permiten observar un panorama difícil, de un partido que no supo adaptarse al ejercicio del poder y que está perdiendo la carrera presidencial rumbo a 2012.

Difícilmente podrán recuperarse de esta crisis, si como Felipe Calderón, siguen cerrando los espacios de poder a las otras corrientes del partido y continúan por el camino fácil de tener sólo a sus amigos en ellos.